Desde 2011, el petróleo Brent se ha movido entre una directriz bajista y otra alcista. A finales de 2014 rompió por la menos tocada y entró en caída libre, rompiendo directrices de largo plazo con volumen decreciente y sin alcanzar los mínimos de 2003 y 2009, ya muy lejanos en el tiempo. En otras palabras, no tenemos soportes fiables a la vista.
Desde comienzos de febrero ha rebotado con fuerza y se podría entrar a corto a los precios actuales con un objetivo de venta en torno a los 66. Por el contrario, ante la pérdida de los 59 en los próximos días, nos mantendríamos al margen.
Y hasta aquí la ortodoxia. Algunos sabéis que no me fío gran cosa de ello, que llevo un més apostando por el petróleo y sigo apostando por él en el medio plazo con una vuelta a volatilidades "normales". Espero tener tiempo de escribir en profundidad sobre este activo, pero adelanto que veo cualquier recorte como una nueva oportunidad de entrar a buen precio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario